Bajo el suelo de la Ciudad del Vaticano, en su despacho del Archivo Secreto, la hermana Ottavia Salina, paleógrafa, recibe el encargo de descifrar los extraños tatuajes aparecidos en el cadaver de un etíope: siete letras griegas y siete cruces. Junto al cuerpo había tres trozos de madera aparentemente sin valor. Todo hace sospechar que esos trozos pertenecen a la Vera Cruz. Acompañada por el profesor Boswell, un arqueólogo de Alejandría, y por el capitán de la Guardia Suiza, Kaspar Gauser-Röist, la protagonista deberá descubrir quién está detrás de la desaparición de las reliquias en las iglesias de todo el mundo y vivirá una aventura llena de enigmas: siete pruebas basadas en los siete pecados capitales en las que Dante Alighieri y el Purgatorio de la Divina Comedia parecen tener las claves. Unas pruebas que les llevarán de Roma a Antioquía, pasando por Rávena, Atenas, Jerusalén, Constantinopla y Alejandría, en un arriesgado y emocionante itinerario en el que tratarán de averiguar quién es el último Catón.
Novela que leí hace unos 3 años y de la que guardo un muy buen recuerdo, tiene un muy buen argumento, las descripciones y personajes están muy bien conseguidos y la forma de escribir de esta escritora hace que no se pierda el hilo ni la emoción en ningún momento, por lo que se hace corta e intensa. Muy recomendable para quién le guste este tipo de lectura o simplemente quiera leer un libro que distraiga y te llene con la historia.
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